domingo, 25 de septiembre de 2016

"CÓMO ATACA AL HOMBRE EL DEMONIO" Lección 32




Lección 32

“LOS ÁNGELES Probemos su existencia”

(Continuación)

CÓMO ATACA AL HOMBRE EL DEMONIO


275.– El ASEDIO, que consiste en una acción, desde fuera, haciendo oír ruidos nocturnos, toques misteriosos en puertas, paredes y ventanas. Rompiendo vidrios u otros objetos y quitando así, la paz del alma y llevándola, quizá, a la desesperación.

276. – La OBSECIÓN, es un ataque personal, actuando sobre miembros y sentidos. Cosa grave que generalmente ocurre a los Santos o a los muy perversos.

277. – La SEDUCCIÓN, haciendo prodigios que parecen milagros (Eso se ve actualmente, con increíble frecuencia, en el carismatismo o grupos de oración).

278. – Las FALSAS APARICIONES, las dolosas e hipócritas curaciones de milagrosos curanderos, de falsos e ignorantes psíquicos, de grupos de fanáticos, de brujos…

279. – La FALSA CIENCIA, el engaño con la falsa ciencia, para demeritar los verdaderos milagros y los carismas extraordinarios, interpretándolos a la vana luz de la Parapsicología que, además, no es una ciencia y pretende suplir lo sobrenatural.

280. – FATUA ORACIÓN, la ilusión de una fatua oración, cuando existen los sentidos para hacer creer que alguien está inundado del Espíritu Santo y goza de sus carismas extraordinarios.

281. – La POSESIÓN DIABÓLICA, que así, como quien se introduce en una casa, el maligno penetra en el cuerpo del hombre, dominando sus facultades físicas, llegando hasta privarle de la libertad; pero no puede tocar su alma, porque Dios no lo permite.

282. – Sin embargo, escuché decir a un gran exorcista italiano, que hay circunstancias; aunque rarísimas, en que el demonio ya no sólo domina el cuerpo; sino también el alma: ya no sólo son gestos, palabras incoherentes y sacrílegas contra Dios y lo sagrado; sino que, de alguna manera, toca el alma del sujeto para inclinarlo totalmente al odio y de allí vemos la monstruosa criminalidad del hombre contra el hombre…

283. – Y como son multitud los demonios y con poderes sobrenaturales superiores a los del hombre, provocan deserción del servicio de Dios en las creaturas humanas apartándolas de lo bueno y verdadero. En esta catástrofe mundial, donde en todos los sectores y en todas las jerarquías, de la primera a la última, se ven demonios, tomando una posición estratégica que han movido, personalmente, a altas cúpulas del mundo, con el fin de perder a la humanidad.

284. – Sin embargo, más poderoso que todo esto es la Santísima Trinidad, la Virgen Inmaculada, San José, la Iglesia, la Santa Misa, la Gracia, la Oración…
285. – “Revestíos de toda armadura de Dios para que podáis resistir las insidias del diablo; que no es nuestra lucha contra la sangre y la carne, sino contra los principios, contra las potestades, contra los demonios de este mundo tenebroso, contra los espíritus malos de los aires” (Efesios VI, 11-12).

         Insisto visiten la página de “Los Ángeles ¿verdad o mentira? De Sor Clotilde. La Doctrina no es de Sor Clotilde, la Doctrina es de la Iglesia Católica, Sor Clotilde sólo la expone. Ya no arriesguen su alma leyendo falsedades.

Sor Clotilde




 





domingo, 18 de septiembre de 2016

"COMO ATACA AL HOMBRE EL DEMONIO" Lección 31




“LOS ÁNGELES Probemos su existencia”

(Continuación)

COMO ATACA AL HOMBRE EL DEMONIO


268.– Es verdad que no toda mala sugerencia viene del Diablo, porque existe la inclinación en el ser humano, llamada concupiscencia -fruto del pecado original-.

269. – Además la atracción del mundo, que en este caso se entiende por todo lo que el ambiente pecaminoso ofrece, para degradar al hombre.

270. – Así que los enemigos del alma son tres: el Demonio, el Mundo y la Carne. Sin embargo, sin el demonio sería más fácil vencer al mundo y a la carne.

271. – Es, pues, una realidad que el demonio, al odiar a Dios, odia a todas sus creaturas y, sobre todo, a los hombres y, más aún, porque sabe que alaban y glorifican al creador.

272. – El demonio y sus secuaces luchan por perder a las almas. Es la envidia y el odio lo que lleva, no sólo a desear, sino a trabajar para que los hombres caigan al infierno.

273. – “Estad alertas y velad, que vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda rondando y busca a quien devorar” (I Pablo V,8).

274. – Sin embargo, la sugerencia diabólica y las circunstancias que pone y propone son generalmente las comunes; pero hay otras nada comunes, que usa como casos extraordinarios.

         Continuaremos la próxima semana con la clasificación de las muchas formas con las que el diablo ataca al hombre.


Sor Clotilde



 

domingo, 11 de septiembre de 2016

"Naturaleza del Demonio" Lección 30



“LOS ÁNGELES Probemos su existencia”

LOS ÁNGELES CAÍDOS
(Continuación)


NATURALEZA DEL DEMONIO


253.– Los Ángeles caídos conservan íntegra la naturaleza, pero privada de la gracia y de otros dones naturales.

254. – Su entendimiento se encuentra obnibulado por el odio y, su voluntad naturalmente inclinada y confirmada en el mal.

255.- Excluidos para siempre, de la Bienaventuranza Eterna, por la que ellos padecen más que cualquier condenado, puesto que percibieron tan cercana la Bienaventuranza y al mismo Dios. Por tanto, es peor su desesperación, su despecho por lo que perdieron y, que ya no podrán alcanzar.

256.- Odian a los hombres, sobre todo a los buenos por ser imagen y semejanza de Dios, objeto primordial de su odio.

257.- Entre sí se odian y se maldicen, por la causa de la recíproca perdición.
258.- No conocen el amor, “Y quien no ama permanece en la muerte”, nos dice San Juan.

259.- Son cómplices de la maldad. Son la peor de las mafias.

260.- Además, como la naturaleza en sí no sufrió menoscabo por el pecado, los hay superiores e inferiores y eso les es insoportable.

261.- Sólo se relacionan y obedecen, para hacer el mal a las creaturas, sobre todo al hombre.

262.- El sitio de su permanencia es el infierno, pero ellos andan por todas partes con el fin de perder a los hombres, y Dios lo permite para poner a prueba la fidelidad de las almas.

EXISTENCIA DEL DEMONIO

263.- La existencia del Demonio y de todos los ángeles caídos, se prueba desde el Libro del Génesis II,1 sig. —Libro de Job I.

264.- En muchos pasajes del A. y del N. Testamento se prueba la existencia del maligno: “Veía yo a Satanás caer del cielo como un rayo” (Luc.X,18)—“Apartaos de mí, malditos al fuego eterno, preparado para el diablo y para sus ángeles” (Mt.XXV,41)—y otros muchos más.

265.- La Iglesia enseña lo mismo con Magisterio infalible: “Sí alguno dijere que el diablo no fue primero un ángel bueno hecho por Dios y que su naturaleza angelical no fue obra de Dios … sea anatema” (Concilio de Braga A. 561)
266.- “El diablo y demás demonios ciertamente fueron creados por Dios buenos por naturaleza; más ellos, por sí mismos, se hicieron malos” (Concilio de Letrán A. 1215).

267.- Cito ahora a un reconocido autor contemporáneo, cuya doctrina y enseñanza se cifra en las fuentes de la Revelación explicada por el Magisterio Eclesiástico: “Digan lo que digan algunos teólogos superficiales, el diablo es, para la fe cristiana, una presencia misteriosa pero real, no meramente simbólica sino personal, y es una realidad poderosa (El Príncipe de este mundo, como lo llama el N. T. que nos recuerda repetidamente su existencia). Su maléfica libertad sobrehumana opuesta a la de Dios; como nos lo muestra una lectura realista de la historia, con su abismo de atrocidades, continuamente renovada y que no puede explicarse solamente con el comportamiento humano.

         El hombre, por sí sólo no tiene fuerza suficiente para oponerse a Satanás; pero Satanás no es otro Dios: Unidos a Jesús podemos estar ciertos de vencerlo. Es Cristo el Dios cercano quien tiene el poder y la voluntad de liberarnos; por eso el Evangelio es verdaderamente la Buena Nueva. Por eso también debemos seguir anunciándolo en aquellos “Regímenes” de terror que son frecuentemente las religiones no cristianas y diré todavía más; la cultura actual del Occidente Moderno, vive gracias a la liberación del terror de los demonios que le trajo el cristianismo; “PERO SI ESTA LUZ REDENTORA DE CRISTO SE APAGARA, A PESAR DE TODA SU SABIDURÍA Y DE TODA SU TECNOLOGÍA, EL MUNDO VOLVERÍA A CAER NUEVAMENTE EN EL TERROR Y LA DESESPERACIÓN. Y ya pueden verse signos de ese retorno de las fuerzas obscuras al tiempo que rebrotan en el mundo secularizado los cultos satánicos” (Cardenal Joseph Ratzinger, informe Sobre la Fe, Madrid, 1985).

        Cuando el Santo Padre Benedicto XVI, era el Cardenal Joseph Ratzinger encargado de la Fe, era el año 1985, hace 31 años. En estos años, hemos podido considerar la rapidez con que el demonio ha trabajado, por un lado, los cómplices humanos que tienen contacto directo con él y que son los que ordenan se ejecute lo inconcebible: La tecnología que en lugar de darle un buen uso, para mejorar y elevar al hombre se usa para rebajarlo, para llevarlo a la degeneración y para que se haga esclavo y dependiente de dicha tecnología. El tipo de música, que ya no es música, la clase de arte grotesco en todas sus expresiones, los lamentables y corruptos medios de comunicación, la junta de parejas sin casarse, con la aceptación de los mayores; las enseñanzas y prácticas inmorales en las escuelas, la liberación femenina que fue golpe mortal a los países, a la sociedad y a la familia. El aborto, el crimen inexplicable y cruel que ejecuta una madre contra su hijo. Los crímenes masivos, espeluznantes y macabros, de los hombres contra los hombres y, muchas cosas más.

Ahora, lo inaudito: “Matrimonios entre gentes del mismo sexo, con adopción de niños oficialmente declarado en la Constitución.

Ya se enfrentó el gobierno fuertemente a Dios. ¡Qué aberración, que maldad! Y que, ahora cada niño o joven o adulto, puede escoger su sexo y que el gobierno dará los medios para cambiarlo y, que sí los padres de familia no lo permiten irán a la cárcel. Un libro de texto corruptor de la más bella inocencia. ¡El colmo! ¡Ponerse así contra Dios! ¿Qué vendrá después?

       Las personas humanas esencialmente nacen hombre o mujer, es decir que el sexo está en lo físico, la fisiología y, en toda la naturaleza del ser humano, desde el primer momento de su ser.

Pero no sólo el diablo y sus secuaces, como lo dije al principio, sino todos los pueblos concupiscentes que han ido permitiendo el mal, el cual ha entrado astutamente, hasta convencer al ser humano de que lo malo es bueno. De los derechos falsos sin deberes, de una vida promiscua y de un descenso fatal.

Si es un ataque diabólico sobrenatural, tomemos las armas sobrenaturales. Si no nos acogemos a Dios, será una guerra desigual: La Oración, la Gracia, las Fuentes Primitivas y venceremos el mal.

        Advertimos que los ángeles de la Nueva Era; a quienes muchos siguen, incluyendo católicos, son parte del demonio unido a cierta categoría de hombres, para confundir y arrastrar almas al Infierno.


Sor Clotilde


 






domingo, 4 de septiembre de 2016

"Los Ángeles caídos, origen del demonio" Lección 29



Lección 29

“LOS ÁNGELES Probemos su existencia”
(Continuación)

LOS ÁNGELES CAÍDOS

ORIGEN DEL DEMONIO


237.– “En esto apareció un gran prodigio en el cielo, una mujer vestida de sol y la luna debajo de sus pies, en su cabeza una corona de doce estrellas y, estando encinta, gritaba con ansias de dar a luz, y sufría dolores de parto. Al mismo tiempo, se vio en el cielo otro portento: Y era un dragón descomunal bermejo, con 7 cabezas y 10 cuernos y, en las cabezas, tenía 7 diademas y su cola traía arrastrando a la tercera parte de las estrellas del cielo, y arrojolas a la tierra. Este dragón, se puso delante de la mujer que estaba para dar a luz, a fin de tragarse al hijo luego que ella hubiera alumbrado. Ella dió a luz un Hijo varón, el que apacentará a todas las naciones con cetro de hierro; y el Hijo fue arrebatado de Dios y para el trono suyo, y la mujer huyó al desierto donde tiene un lugar preparado por Dios, para que allí la sustente durante 1200 años”. (Apocalipsis de San Juan).

238. – “Entre tanto, se trabo una batalla grande en el cielo; Miguel y sus Ángeles pelearon contra el dragón y peleaba el dragón y sus ángeles, más no prevalecieron y no se halló más su lugar en el cielo, y fue precipitado el gran dragón, la serpiente antigua que se llama diablo y satanás, el engañador del universo, arrojado fue a la tierra y con él fueron arrojados sus ángeles. Y oí una gran voz en el cielo que decía: “Ahora ha llegado la salvación, el poderío y el reinado de Nuestro Dios y el imperio de su Cristo, porque ha sido precipitado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de Nuestro Señor Dios día y noche. Ellos lo han vencido en Virtud de la Sangre del Cordero, y por la palabra de la cual daban testimonio, menospreciando sus vidas hasta morir. Por tanto, alegraos, oh cielos y los que habitáis en ellos, más ay, de la tierra y del mar porque descendió a vosotros el diablo, lleno de gran furor, sabiendo que le queda poco tiempo.

239. – Cuando el dragón se vio precipitado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado luz al varón, pero a la mujer le fueron dadas dos alas de águila grandes, para que volase al desierto, a su sitio, donde es sustentada por un tiempo y (Dos) tiempos y la mitad de un tiempo, fuera de la vista de la serpiente. Entonces la serpiente arrojo de su boca en pos de la mujer, agua como un río para que ella fuese arrastrada por la corriente. Más la tierra vino en ayuda de la mujer, pues abrió la tierra su boca, y sorbiéndose el río que el dragón había arrojado de su boca, y se enfureció el dragón contra la mujer, y se fue a hacer guerra contra el resto del linaje de ella, que son los que guardan los Mandamientos de Dios, mantienen el testimonio de Jesús y se aposentan sobre la arena del mar”. (Apocalipsis de San Juan).

240. – Aquí se habla de una gran batalla en el cielo entre San Miguel y sus Ángeles y el Dragón y los suyos. Realidad e imagen de las luchas perennes, entre los Ángeles buenos que nos inclinan a la salvación y los ángeles malos que nos conducen a la perdición.

241. – Hemos tomado el Libro profético de San Juan, denominado el Apocalipsis Capitulo XII, 1-17 para fundamentar la historia real de los ángeles malos, cuyo caudillo es Lucifer, quien se enfrenta al mismo Dios por la soberbia y la envidia. Castigándolos Dios, después de luchar el malo y los Ángeles buenos, con el fuego eterno del infierno, creado para el diablo y sus seguidores.

242. – Cuenta la tradición eclesiástica, que resume las conclusiones de profundas exégesis, realizadas sobre distintos textos de la Sagrada Escritura (ejemplo: Isaías XIV, 13-15), que el más bello e inteligente de los Ángeles creados, cuando Dios les reveló a los Ángeles que el Verbo se haría Hombre para salvar al mundo y que todos ellos se postrarían a su adoración, luzbel, se contempló a sí mismo, se ensoberbeció y díjole a Dios: “Non servíam”, siguiéndole multitud de creaturas angelicales. En seguida San Miguel Arcángel se enfrenta a Luzbel, en una lucha de entendimiento y de ideas. Se entabla una gran batalla en el cielo. Lucifer dice: “¿Quién como yo?” y, el no menos hermoso y excelente arcángel, San Miguel, proclama con fuerza y sublimidad: “¿Quién como Dios?”. Terminada esta guerra mental con la creación del Infierno, a donde fueron arrojados todos los ángeles rebeldes con su caudillo Lucifer.

243. - Está narración prueba que los ángeles malos habían sido creados en gracia, y tenían como destino la visión beatifica por toda la Eternidad; pero abusando de su libertad, en el momento de la prueba, tomaron como suyos los dones que graciosamente les habían sido otorgados por su Creador, se rebelaron contra Él y lo perdieron todo.

244. – Satanás calló al infierno por soberbio. Y la historia se repite: ¿Por qué pecaron Adán y Eva? Por soberbia, querían ser como Dios. ¿Y, por qué peca hoy el hombre? Por soberbia: desprecia las Leyes Naturales y Divinas y se dicta, a sí mismo, sus propias leyes. En aras del ego, olvida a Dios, para idolatrarse a sí y a toda creatura que, de algún modo, satisfaga ese ego, olvidando su destino eterno.

245. – Ojalá todos fuéramos como San Miguel Arcángel, y supiéramos, a cualquier precio, defender los Derechos de Dios y de su Iglesia.

246. – También se ve con diáfana claridad, la creación del infierno, ¡Cómo arroja Nuestro Señor al diablo y sus secuaces al abismo! ¡Cómo triunfa y triunfará Jesucristo, a pesar de la persecución nefasta de satanás, contra toda creatura humana!

247. – La Profecía aludida es profundamente bella en su exposición, pero como toda Profecía, es un Misterio para el común de los católicos y, de cierta forma, también para los exégetas. Sin embargo y sin que pretendamos, por nuestra ignorancia, hacer una exégesis personal de la misma, podemos, con la autoridad de lo que la Iglesia nos ha enseñado, creer que esto, narrado por el Apocalipsis es el origen del demonio.

248. - El Apocalipsis de San Juan es un libro profético de gran estatura e interminable profundidad. Es un Libro que nos hace sentir al leerlo, aunque a veces no podamos entenderlo, que salimos de la superficie de la tierra para saborear un poco de cielo. El Apocalipsis tiene una belleza incomparable, vive uno más de cerca los Misterios de Dios. Es bello y verídico en sus figuras y analogías.

249. -Es verdad, que toda la Sagrada Escritura tiene sabor a Eternidad y, Cómo no había de tenerlo si es Revelación del Dios Infinito y Eterno, cuya palabra también es eterna e infinita. La exégesis, las mismas declaraciones del Magisterio, penetran esta Revelación, hasta donde Dios lo ve necesario y lo permite. Pero el Apocalipsis, es un Libro tan hermoso y sublime, que se presenta como un triunfo; como una luz brillantísima dentro de los Libros Proféticos de la Revelación de Dios.

250. -Hoy se atreven los laicos, no sólo a querer explicar la Sagrada Escritura, sino, sin estudio alguno de la misma, quieren entender y explicar el Libro del Apocalipsis que merece una exégesis muy singular y que, no estamos señalados ni capacitados para hacer una falsa “Exégesis” de la Revelación Divina, como la hacen los protestantes y por lo que hay tantas sectas.

251. – Ahora hay quienes expresan que el Apocalipsis, no es un Libro Profético; sino un Libro Simbólico, del cual ha pasado su época, que no hemos de temer por el castigo de Dios o el fin del mundo, porque ese no es su contenido, pues no tiene autoridad Profética y, sí simbólica belleza.

252. – Se equivocan los Pastores y Laicos que aseveran tal herejía, pues yo digo que el Santo Libro del Apocalipsis es Profético por antonomasia y que las figuras que se usan para expresar el tema profético, sí, son términos humanos. Pero todo es inspirado de Dios. A tales profecías les acompañan las figuras, las analogías para que algo podamos comprender, pero en su concepto propio, son parte de la esencia del Libro Profético.


Sor Clotilde