martes, 29 de diciembre de 2015


CATECISMO DE LOS ÁNGELES

LECCION 1.

            Preocupada por saber que muchas personas buscan el conocimiento de Los Ángeles pero que, en lugar de adquirir dicho conocimiento a través de la Doctrina Católica, andan en pos de falsas y ridículas doctrinas sobre estos bellos Espíritus. Doctrinas que enseñan los falsos maestros cuyo interés, además del dinero, es infundir la confusión hasta llegar a la herejía.
            Así, que, desde hoy, iniciaremos la catequesis sobre el estudio de Los Ángeles, tomando como fundamento el libro: “Los Ángeles, ¿Verdad ó Mentira?” que escribió una servidora, Sor Clotilde García Espejel.
1.    ¿Si existen Los Ángeles?
R.-Toca a la Revelación Divina en su inagotable fuente de la Sagrada Escritura, probarnos la existencia de dichos espíritus.

2.    ¿Cómo lo prueba la Sagrada Escritura?
R.- Entre infinidad de textos que se encuentran en el Libro Sagrado, citaremos los siguientes:
“Tomó el cuchillo y tendió luego su brazo para degollar a su hijo, pero le grito desde los cielos el ángel de Yahvéh diciendo: ¡Abraham, Abraham! No alargues tu mano contra el niño, ni le hagas nada, pues ahora sé que tú eres temeroso de Dios, ya que no me has negado a tú único hijo” (Gén. XXII ,10-11).
      “Levantóse el ángel de Yahveh que marchaba al frente del ejército de Israel” (Éxodo XIV,19).
      “Tobías encontró un gallardo joven, que estaba ya con el vestido ceñido y como dispuesto a emprender el viaje, sin saber que era un ángel de Dios” (Tobías V).
      “Aparecióse entonces de pie un ángel a la derecha del altar de los perfumes y al verle Zacarías, se turbo y el temor se apodero de él” (Luc. I,11-12).
      “El Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazareth” (Luc. I, 26).
      “Hé aquí que un ángel del Señor se le apareció en sueños a San José y le dijo: “José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu esposa, porque lo concebido en ella viene de Espíritu Santo” (Mat. I,20).
      “Luego que partieron un ángel del Señor se le aprecio en sueños y le dijo a José: “Levántate, toma contigo al Niño y a su Madre y huye a Egipto;” (Mat. II,13).
      “Muerto Herodes, un ángel del Señor se le apareció en sueños a José en Egipto y le dijo: “Levantate, toma contigo al Niño y a su Madre, y marcha a tierra de Israel” (Mat. II, 19-20).
      “Más un ángel del Señor abrió por la noche, las puestas de la cárcel” (Hechos V, 19).
      “¿Oh piensas que no puedo rogar a mi Padre y me dará al punto más de doce legiones de ángeles?” (Mat. XXVI-53).

           

 

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